Dos goles de Messi y triunfo del Barcelona 3 a 1 sobre el Milan para llegar a la semifinal de la Champions League. Ahora se viene Chelsea o Benfica. Una semifinal más, un record más... Barcelona y Messi siguen haciendo historia. Victoria sobre el Milan para llegar a la semi de la Champions y dos goles de Leo para que sus números sean cada día más increíbles.


El partido arrancó y terminó como los dos se lo imaginaron: uno sería el dominador de la pelota y el otro, esperaría y saldría rápido para meter la contra. El tema es que el Barcelona pegó más fuerte. Con Messi encendido pero más preciso en los penales que en otras definiciones, el Barcelona sacó diferencia con un penal (se lo hicieron a Leo). Los italianos no salieron de su libreto y tenían razón: con la contra empezaron a ganar espacios y Nocerino vio el hueco que otros no vieron para poner el 1 a 1.

En estos momentos de tensión, ese animal del concepto de juego que es Iniesta y la paciencia del equipo llevó a que siguieran transitando el camino que transitan siempre. El toque como premisa, la circulación de pelota como dogma. Y aunque el segundo penal pudo generar polémica, fue el Barsa el que llevó la historia.

Sólo faltó que Iniesta (si no estuviera Messi, ¿sería el mejor del mundo?) diera una clase magistral de cómo tomarse el tiempo necesario para definir dentro del área. Un 3 a 1 que lo pone en la semis (jugará con el ganador del Chelsea-Benfica). Barcelona sueña con retener la Champions, tiene con qué.

Martes, 3 de abril de 2012